El Ayuntamiento insta a la Delegación de Educación y a la comisión técnica responsable de la escolarización que reconsidere la exclusión de los jóvenes de las rutas de autobús y se ampara en las protestas de los padres por “discriminación”

 

El último Pleno ordinario de la Corporación Municipal, correspondiente al mes de noviembre, aprobó una propuesta del concejal-delegado de Transporte, Salvador Herrera, que insta a la Delegación Territorial de Educación de la Junta de Andalucía a que facilite el transporte escolar a más de una decena de nuevos alumnos y alumnas que este curso se han incorporado al IES Huerta Alta y que no disfrutan del servicio de autobús en sus paradas. El texto, que recibió los votos favorables de PP, Ciudadanos e Izquierda Unida, y las abstenciones del PSOE y Alhaurín Despierta, incorporó una enmienda del portavoz adjunto de C’s, Curro Basagoiti, en la que extiende su petición a la comisión técnica responsable de la escolarización, compuesta por los equipos directivos de los centros educativos implicados, ya que fue ésta la que decidió excluir a dichos jóvenes de la prestación del servicio.

La propuesta de Herrera viene apoyada en un escrito registrado en el Ayuntamiento por un grupo de padres y madres de esos escolares, quienes piden amparo a la institución municipal para lograr una solución satisfactoria, tras sus “reiterados e infructuosos” intentos ante la dirección del instituto y ante la Jefatura de Servicio de Transporte de Educación. Los progenitores entienden que existe “discriminación” hacia sus hijos, menores de edad, porque han quedado excluidos de las rutas de transporte escolar, “pues tienen previsto en un futuro hacer desaparecer todas las paradas que les solicitamos, ya que con estas medidas pretenden, a pesar de ser su centro el receptor de dichos alumnos -procedentes del IES Galileo-, disuadirlos y que opten por otros centros de Secundaria”.

Los padres explican que dichas paradas están en funcionamiento para el actual curso escolar y “exclusivamente para antiguos alumnos y sus hermanos” y que lo más grave reside en que solo son ocupados a diario en un 15% de su capacidad total, “ocasionando un gran trastorno a los alumnos no autorizados a utilizar esas plazas”, ya que tienen que recorrer casi 8 kilómetros a pie entre ida y vuelta para poder ir a clase, “mientras el autobús circula medio vacío”.

El texto concluye con la exigencia de tener los mismos derechos que el resto de estudiantes y reitera la petición al Ayuntamiento para que interceda.

El punto generó un amplio debate -a veces, encendido- entre los grupos municipales, e incluso el PSOE defendió los argumentos de la Delegación Territorial, de acuerdo a los criterios geográficos y la redistribución de centros, si bien la gran mayoría de portavoces admitió que existe “un agravio evidente” y que no cuesta tanto prestar el servicio, habiendo plazas libres.