Fernández España destaca que esta iniciativa permite avanzar en la accesibilidad y mejorar la calidad del servicio del transporte público

La Consejería de Fomento y Vivienda y el Consorcio de Transporte Metropolitano del Área de Málaga, órgano impulsado por la Junta de Andalucía, han instalado durante el ejercicio 2016 un total de 15 nuevas marquesinas adaptadas en 13 municipios de la provincia malagueña, con una inversión de unos 72.823 euros. Este equipamiento accesible responde al objetivo de la Junta de Andalucía de avanzar en la accesibilidad y en la mejora de la calidad del servicio de transporte público de viajeros por carretera que se presta mediante autobuses interurbanos y metropolitanos.

El delegado territorial de Fomento y Vivienda en Málaga, Francisco Fernández España, ha destacado que “esta iniciativa responde al objetivo de la Junta de hacer cada vez más accesible el servicio público de transporte al colectivo de personas con movilidad reducida, a quienes debemos facilitarle la movilidad en su vida diaria a través de instalaciones que permitan, por un lado, un acceso adecuado a los autobuses y, por otro, un tiempo de espera en condiciones de confortabilidad”. Asimismo, el delegado territorial ha explicado que “desde la Junta seguiremos trabajando con este compromiso, no sólo mejorando marquesinas sino también adecuando los autobuses”.

De esas 15 paradas accesibles, la Consejería se ha hecho cargo de nueve, que se localizan en los municipios de Montecorto, Villanueva de Algaidas, Alozaina, Yunquera, Montejaque, Alcaucín, Humilladero, Valle de Abdalajís y Benarrabá. Esta actuación ha supuesto un desembolso de 42.823 euros.

Por su parte, el Consorcio ha implantado las otras seis restantes, con una inversión de  30.000 euros, en Alhaurín el Grande, Alhaurín de la Torre, Mijas y Rincón de la Victoria.

Las paradas instaladas tienen unas dimensiones que posibilitan la entrada y permanencia de sillas de ruedas, a lo que se suma la inclusión de un apoyo, permitiendo con ello al colectivo con movilidad reducida contar con una barra de sujeción que facilita su confort durante el tiempo de espera. Asimismo, el banco de espera de la parada se ha colocado a la altura recomendada por la normativa de accesibilidad y dispone de reposabrazos en sus dos laterales exteriores. También incorpora en la parte frontal de la infraestructura dos bandas horizontales con el fin de hacerlas visibles para los discapacitados sensoriales.

Con carácter general, en el diseño y características de este equipamiento se han tenido en cuenta aspectos que posibiliten su visibilidad para el usuario y su integración estética en el entorno en el que se inserta. Estas marquesinas de protección destinadas al resguardo de los usuarios durante el periodo de espera del autobús disponen además de una cubierta, de paneles de cerramiento y señalización, además de un expositor de información.