La barriada Puerta Alhaurín, situada junto al histórico núcleo de Zapata-El Peñón, vivió ayer su Fiesta del Agua, en mitad de un ambiente marcadamente familiar y pleno de diversión durante toda la jornada dominical, con una gigantesca paella como gran reclamo gastronómico.

La asociación de vecinos del barrio programó diferentes actividades, tanto para los más pequeños como para los mayores: espectáculos de baile, rifas y hasta una original batalla de ‘todos contra todos’, donde se lanzaron hasta 1.000 globos de agua, como clausura de los actos.

Los grupos que actuaron antes del almuerzo de convivencia estaban compuestos chicos y chicas del municipio, que deleitaron con su arte a todos los allí presentes de la mano de sus dos profesoras, Miriam Ramos y Raquel Rosado. Todos se movieron al ritmo de zumba, flamenco y música moderna.

Además, los pequeños combatieron el intenso calor con dos grandes castillos hinchables de agua en los que pasaron el día jugando mientras se refrescaban.

A medio día se pudo degustar una paella para alrededor de 500 personas haciendo de esta IV edición de la Fiesta del Agua todo un derroche de risas y alegría, en palabras de la presidenta de la asociación, Elisa Millán.