(Jmm Caminero) Además de restos arqueológicos de Mesopotamia y la Grecia Antigua, existe una obra de Zurbarán, Inmaculada Concepción Niña. También obras de Luis de Morales, Salzillo, Carmona, Tiziano…
La historia y la Historia muestra y demuestra, que ésta acontece, por realidades causales y casuales, es decir, necesarias y azarosas, la cuestión de la libertad y la no libertad, determinismo e indeterminismo en la humanidad. Esto, para explicar que el mundo actual ha llevado al cristianismo europeo, a que miles, docenas de miles de obras de arte, encargadas o regaladas durante siglos, hoy, por cerramientos de iglesias, por mejor conservación y custodia, y por las realidades sociales actuales, se hayan creado docenas y cientos de museos eclesiásticos y religiosos en Europa y en España. Que tienen como finalidad conservar, estudiar, exponer obras de arte religioso y, algunas de no religioso que las entidades cristianas han ido conservando durante siglos.
También, supongo a imitación de los Museos Vaticanos, se ha creado una ola y movimiento, de ser consciente que el arte y el arte plástico, puede reunir varias funciones y finalidades, el arte religioso cristiano litúrgico y no litúrgico, es una forma o manera o medio o instrumento de difusión, de pastoral, de evangelización, además de expresar contenidos antropológicos, psicológicos, estéticos, sociales, culturales, etc.
Sin menospreciar, que estas obras, están a la altura, de lo que en otros museos no religiosos se exponen y se valoran, obras de la misma época o tiempo o cultura o sociedad. Obras que pueden estar con los humanos desde hace siglos o incluso milenios.
Sin entrar en los avatares complejos que el arte plástico y el cristianismo ha tenido, especialmente, en el siglo VII-VIII de nuestra era, también en las problemáticas de las confesiones luteranas, al menos, en el catolicismo siempre se ha pensado que al incardinarse, hacerse carne, la Segunda Persona de la Trinidad, o Dios, era legítimo y legal y moral y espiritual y necesario, la representación de la figura del Nazareno, y la narración de sus hechos-historias, aquí en la tierra. Este componente esencial teológico, más otros derivados. Ha llevado a las Autoridades Católicas a realizar una serie de enunciados-declaraciones-mensajes, a lo largo de los siglos, en este orden de realidades, entre otros:
Véase la sesión XXV del Concilio de Trento, léase Carta de Juan Pablo II a los artistas y Discurso de Benedicto XVI a los artistas. Lo cual, nos lleva a pensar, que las autoridades eclesiásticas están siendo conscientes, que en la medida que puedan, tienen que exhibir el arte recogido de siglos, pero, si es posible, incentivar el arte actual cristiano, sea para finalidad litúrgica, sea para finalidad pastoral o evangélica, como imágenes para la catequética, o para ir conservando un depósito de arte actual, en los museos y dependencias religiosas.
Vayan ustedes a cualquier feria de arte actual, y no existe arte religioso, y si existe algo es ir en contra de la religión y del cristianismo en particular. Quizá haya llegado la hora, de ser consciente, que igual que durante siglos, el cristianismo promovió el arte y las artes (música, arquitectura, arte plástico, decoración-diseño-artes aplicadas en la medida de sus posibilidades y con los estilos de cada momento), ahora haya que volver a subirse al tren del arte, como en otras épocas se hizo, reitero, en la medida que se pueda y con los estilos-estética actuales, y, esto es lo que pienso que, sin demasiado tardar, todas las entidades, agentes-actores que se dedican a estas cuestiones, tendrían que ser conscientes.
Quizás, amplificar la red de sinergias que los museos diocesanos y religiosos pueden tener y disponer y amplificar, sería, una de las medidas posibles. Quizás, un Congreso o Conferencia Permanente entre estas entidades, para tener un cauce permanente de ideas y sugerencias y proyectos, etc. Quizás una base iconográfico e iconológica virtual de Arte religioso, por parroquias, diócesis, etc.
Desde la prehistoria, debemos inferir-deducir-inducir-generalizar-observar que la humanidad ha estado siempre bebiendo de las realidades metafísicas, sean más racionalistas o menos, sean más espiritualistas o menos. Quizás, sin ánimo de juzgar a nadie, el tren de las Artes, salvo la arquitectura, el cristianismo se ha dormido un poco. Es cierto, que las representaciones conceptuales y estéticas del arte plástico de estos dos siglos, es muy difícil, que obras de esos estilos se expongan en los templos religiosos para la devoción, pero estas obras de estos estilos, si podrían servir para la pastoral, para la exposición en otros ámbitos religiosos y parroquiales, en salas y pasillos, en difusión de imágenes por Internet, etc.
Es decir, quizás, no se haya sido consciente, de la influencia de la sensibilidad-percepción-belleza de lo humano y en lo humano, del arte religioso para la evangelización. Pondré una cuestión, que desconozco la respuesta, supongo que casi todas las parroquias de Guadalajara, ya tendrán una página en Internet de la parroquia, me pregunto, cuántas tendrás en esa Web una pestaña o enlace a este museo que estamos comentando, simplemente un enlace… ¿¡Cuántas!?
Para terminar, sin ánimo de ofender a nadie, y siguiendo, el principio de los viejos griegos helenísticos, que “no sirve ninguna filosofía, que no intente curar algún mal humano”, yo, modestamente me atrevería a indicar, que los museos diocesanos de nuestro viejo-antiguo-terruño ibérico, merecerían que fuesen, en la medida de lo posible, disponer de una sala para arte actual, de este último siglo, religioso y religioso cristiano. Cierto con las estéticas actuales, porque podría ser la base, a imitación de la Colección de Arte Actual del Vaticano, para la pastoral-evangelización-difusión de temáticas antropológicas y psicológicas y metafísicas y espirituales, que todo hombre-mujer anhela-necesita-desea-intuye… Paz y bien.
http://youtube.com/jmmcaminero © jmm caminero (17 julio-04 agosto 2021 cr).
Fin artículo 2.613º: “Desde 1968 el Museo Diocesano de Arte Antiguo de Sigüenza”.