(Palatat) Una vez más, Alhaurín de la Torre, uno de los municipios con más pujanza de la Costa del Sol, se dispone a elegir a sus ediles, en esta ocasión inmerso en un panorama político líquido, dúctil e incierto. Todo parece indicar que el fin de las mayorías absolutas ha llegado desde el ámbito estatal y autonómico a nuestros municipios para quedarse. Alhaurín de Torre no será una excepción. Es hora de pactar, de negociar y de abandonar los intereses partidistas para tornar la mirada hacia el bien común.

La Plataforma de Afectados por las Líneas de Alta Tensión de Alhaurín de la Torre (PALATAT), es una asociación vecinal que reivindica desde su fundación, hace seis años, el desvío de las líneas troncales de transporte eléctrico que atraviesan peligrosamente numerosas zonas residenciales de nuestro municipio.
Para aquellos que todavía lo duden, la PALATAT es una plataforma vecinal apolítica, así queda recogido en sus estatutos y así se ha mantenido hasta hoy. Desde la PALATAT no hacemos política, pero necesitamos de la política para alcanzar exitosamente nuestro cometido, pues solo con decisiones políticas se puede acometer este tipo de correcciones en nuestro medio urbano.
Conscientes de ello, desde nuestros comienzos hemos iniciado conversaciones con la mayoría de los partidos políticos con representación plenaria; todos ellos mostraron su conformidad con los objetivos de nuestra plataforma, algunos, como el PSOE-A, Izquierda Unida y Podemos (hoy Adelante Alhaurín de la Torre), Alhaurín Despierta (hoy Electores Verdes-Equo Iniciativa) y UPyD lo hicieron a través de la firma de un manifiesto. Alhaurín Despierta dio un paso más allá y llegó a presentar una moción con la que se pretendía cobrar una tasa de ocupación del dominio público a las empresas privadas eléctricas, con el objeto de que dichos fondos pudieran emplearse para financiar el desvío de las líneas de alta tensión. El Partido Popular, algo más receloso, pasó, con el tiempo, de oponerse a prestarnos su apoyo con la aprobación de una partida presupuestaria destinada a realizar mediciones de los campos electromagnéticos en las zonas residenciales más afectadas por estas líneas electrificadas. A Ciudadanos, desde su llegada a la escena política municipal alhaurina, hay que reconocerle su gran interés y preocupación por esta problemática de actualidad en muchos municipios españoles; nos consta que este partido ya ha abanderado, con éxito, en otros municipios de España iniciativas como las que defiende nuestra plataforma.
A pocos días de los comicios, podemos afirmar, con satisfacción, que la mayoría de los partidos políticos en liza incluyen entre sus prioridades programáticas el desvío o soterramiento de esta red de cables eléctricos insalubres para cualquier ser vivo. Siendo así, confiamos que las discrepancias ideológicas, tan sanas para nuestra democracia, no se sustituyan al sentido común y al interés general, pues cuando la mayoría de partidos incluyen en sus programas un mismo asunto solo puede revelar que es sensato y oportuno poner fin a esta lacra que estigmatiza tan lamentablemente nuestros barrios.
La PALATAT solo pretende disolverse, desaparecer, pero no antes de conseguir lo que consideramos justo para las familias alhaurinas que se encuentran en una situación cuanto menos angustiosa frente a la presencia de las enormes torres de hierro que soportan cables altamente electrificados a escasos metros de sus viviendas. Ya nadie, en su sano juicio, niega la necesidad de desviar esta maraña de cables irradiantes de nuestras cabezas. Pasemos del dicho al hecho y hagamos de Alhaurín de la Torre un lugar libre de la alta tensión.

 

El próximo lunes 27 de mayo será la hora de sentarse y hablar entre todos para pasar de la convicción a la acción.

 

La PALATAT