Hasta 15.000 transportistas. Esa es la cifra que maneja el sector para definir el número de conductores que faltan para garantizar la demanda actual en las carreteras españolas.
Una cifra que, dado el volúmen de paro actual en España, podría cubrirse en no mucho plazo dadas las condiciones laborales y salariales que, en según qué empresas, consiguen dichos trabajadores.
Para empezar, hay que entender la revolución que ha sufrido el transporte por tierra. Cuando se quedaron paralizadas las comunicaciones aéreas, las navieras colapsaron por la demanda – teniendo retrasos incluso de meses – y el sector ferroviario no terminaba de cubrir las necesidades, fueron los camiones los que consiguieron mantener la cadena de suministro siempre activa.
Eso es lo que ha hecho que muchas empresas estén apostando por una gestión de hubs en territorio español que está dotando a los polígonos de grandes naves de logística dispuestas a almacenar un stock que sea capaz de dar salida al comercio online cada vez más en auge en nuestro país.
Buena cuenta de eso son los desarrollos que, para más información, se están desarrollando en zonas como el Corredor del Henares o las zonas industriales de Illescas (Toledo), zonas de gran interés por encontrarse en el centro peninsular y poder gestionar, en un máximo de una jornada laboral, las entregas.
“Gracias a la tecnología de las flotas, con seguimientos gps, monitorizaciones del estado mecánico en tiempo real y las alertas que son capaces de ir emitiendo desde la cabina, la logística y entregas son mucho más sencillas a nivel administrativo” explican desde el sector.
Samsara, empresa especializada en soluciones tecnológicas para el sector del transporte, es consciente de que pronto será casi vital contar con estos avances en cabina para poder circular por lo que serán carreteras inteligentes que, de forma automática, podrán conectarse con las cabinas y conductores para facilitarles información de interés sobre los incidentes que puedan sucederse en las vías.
Sin duda, este año será el de muchos candidatos que quieran subirse a los vehículos de las flotas de empresas que, habitualmente, hacen las rutas comerciales en nuestro país. De hecho, ya se está notando un incremento de alumnos en las autoescuelas dispuestos a superar las pruebas del carnet C1, C, C1+E o C+E.
Para entender la importancia de la necesidad de cubrir estos puestos, hay que ir a la estadística: en España, el 90% de las mercancías circulan por carretera. Por tanto, es un sector que, atento a las últimas reivindicaciones, aún tiene mucho recorrido y posibilidad de creación de empleo si, como hasta ahora, las empresas son capaces de movilizar de forma eficaz sus mercancías hasta sus clientes, incluso de forma internacional.
“Actualmente se está peleando por conseguir una mayor rentabilidad para los trayectos, lo que haría de estos puestos una salida para el paro laboral joven y, sobre todo, para las empresas que, en algunos casos, tienen que dejar vehículos parados por la falta de conductores. Es clave conseguir hacer de este sector uno emergente porque el comercio, el transporte y la economía van de la mano del buen funcionamiento de este campo” explican desde el sector.