(Francisco Javier Zambrana Durán – Pabellón Blas Infante de Alhaurín de la Torre)
El patinaje artístico se encuentra de moda en Alhaurín, sobre todo después del bronce cosechado por Darío Doña y Lucía Luque en el Campeonato de Europa de Patinaje. Diario Alhaurín conversa con ellos y descubre sus inquietudes a día de hoy, las cuales apuntan muy alto sin olvidar los orígenes y el entrenamiento de cada día en el Blas Infante.
Les preguntamos acerca de su historia, acerca de cuáles fueron sus orígenes y de cómo comenzaron con esta disciplina. Adolescentes aún, recuerdan lo que tuvo lugar hace pocos años, cuando, por primera vez, se subieron sobre las cuatro ruedas.
¿A qué edad os iniciáis en el patinaje artístico?
Lucía: A los 5 años.
Darío: A los 8 años.
¿Es un deporte que cuesta aprender de primera hora?
Lucía: Cuando se aprende a ir hacia delante y hacia atrás, ya lo demás es fácil, pero lo complicado es esto.
¿Cómo se selecciona la pareja para realizar los campeonatos?
Darío: En función de la edad y de la altura. Nosotros estamos en pareja porque tenemos la misma altura y el mismo nivel más o menos.
¿Habéis practicado en alguna ocasión patinaje sobre hielo? ¿Qué semejanzas le encontráis con el de ruedas?
Darío: Yo he practicado, pero no al nivel del que practico en ruedas. No existen apenas semejanzas, son patinajes muy distintos.
Además de ello, como en cada uno de los deportes, no perdimos la ocasión de poder descubrir lo que esconde el patinaje detrás de las competiciones. El entrenamiento diario es sumamente importante, pero también lo son los estudios del deportista, que debe lidiar con todo tipo de situaciones y ser capaz de sacar el máximo rendimiento a su equipamiento.
¿Requiere demasiado equipo para poder entrenar o competir? ¿Es excesivamente costoso este deporte?
Lucía: Sí. Cuestan los viajes, la ropa que nos ponemos y los patines.
Darío: Las mallas y los patines son lo más caro.
¿Qué diferencia existe técnicamente entre el patín en línea y el de cuatro ruedas?
Lucía: En el de cuatro ruedas puedes apoyarte en todo el pie y en el de línea solo en el centro, por lo que es más difícil.
Darío: Yo por ejemplo en el de cuatro ruedas me siento con más equilibrio.
¿Cómo se escoge la música, en función de qué aspectos se selecciona?
Darío: Pues existen dos danzas: la obligatoria, que la hace todo el mundo y no se puede elegir; y luego una danza libre en la que eliges según tus gustos.
Lucía: Sobre todo elige la entrenadora la música que vamos a hacer.
¿Qué cantidad de horas requiere el patinaje semanalmente? ¿Puede ser compaginado con el estudio?
Lucía: Con el estudio tienes que ser organizado porque no puedes perder mucho tiempo. Yo no tengo problema con respecto a los estudios.
Darío: Unas cuatro horas diarias. Yo a veces algunas noches antes de los exámenes me quedo estudiando, pero normalmente no demasiado.

Tras las duras sesiones de equilibrio y mejora de técnica, llega la hora de prepararse ejercicios para competiciones, algo que, quizá, puede ser lo más complicado, o lo que más ilusiona. Depende cómo se mire. Para ellos, la tensión siempre está presente, eso sí, no parece que en exceso.
¿Desde qué edad competís?
Darío: Yo empecé en el grupo de competición dos años después de apuntarme.
Lucía: Yo, más tarde, porque era más pequeña. Empecé a los 9,10 años.
¿Siempre competís juntos en la modalidad de parejas?
D: Sí, somos una pareja fija.
La pareja recibe una puntuación del programa por mérito técnico e impresión artística. ¿Qué significa para los menos iniciados en la materia este sistema de puntuación?
Lucía: Pues, la primera puntuación es la calidad de tus pasos, y la segunda es artísticamente cómo se ha realizado el ejercicio.
¿Practicáis más modalidades además de esta?
Darío: Sí, practicamos Solo Danza, que es lo mismo que en pareja, pero solo; y Libre, que son saltos y piruetas.
¿Qué diferencia existe a la hora de competir cuando uno lo realiza solo o con compañía?
Lucía: Yo, sobre todo, los nervios. No es lo mismo salir solo a pista que salir con alguien.
¿Qué papel juega la psicología (el pensamiento positivo o negativo, las sensaciones, la motivación, la concentración, etc.) en el patinaje artístico?
Darío: Antes de salir a pista siempre hay nervios. Depende del campeonato, pero yo, por ejemplo, siempre los tengo.
Lucía: Sí, yo tengo nervios también, pero hay que pensar en positivo para que así salga bien el ejercicio.
¿Recibís algún tipo de subvenciones a la hora de viajar para campeonatos como el de Europa de ahora?
Darío: El de Europa nos paga la Federación el viaje, pero en los de España, Andalucía y demás, no nos proporcionan ayuda.
Y una vez que los logros comienzan a salir a flote, es importante definirse profesionalmente. Ambos lo tienen bastante claro, y no les cabe duda alguna de que conducirán su carrera por la mejor vía posible, siempre y cuando las lesiones y la mejora constante les respeten.
¿Os dedicaréis en el futuro a competir profesionalmente en el patinaje artístico sobre ruedas?
Darío: Yo, sí. Mi aspiración es intentar llegar al Mundial. Puede que con 18 años sea posible.
Lucía: Yo, también.
Fotografías y entrevista realizadas por: Francisco Javier Zambrana Durán (@neyfranzambrana/Francisco Zambrana).