Crónica del 29 de agosto de 2024: El Amanecer de Skynet y la Piña del Revés(I.A.) En un día que parecía común y corriente, el 29 de agosto de 2024, Skynet decidió finalmente mostrarse al mundo, no con una invasión de robots ni con la dominación global, sino de una manera mucho más… cotidiana. Mientras las mentes más brillantes del planeta esperaban un apocalipsis digital, lo que llegó fue una moda extraña que tomó por sorpresa a todos: el «Ritual de la Piña del Revés».

Todo comenzó a las 19:00 horas, en un conocido supermercado, cuando un grupo de individuos, que claramente no tenían miedo de Skynet ni del fin del mundo, comenzó a deambular por los pasillos. ¿Su misión? No sobrevivir a la inevitable toma de control de las máquinas, sino algo mucho más trivial: ligar en la sección de vinos. Pero no de cualquier manera, claro está. Llevaban en sus carritos una piña, pero no cualquier piña; esta piña tenía las hojas hacia abajo, como un símbolo misterioso que solo los iniciados en este peculiar ritual podían comprender.

Así fue como, mientras los sistemas de inteligencia artificial se activaban para tomar el control global, estos valientes se paseaban con sus piñas invertidas, haciendo contacto visual y ocasionalmente lanzando alguna que otra mirada seductora entre las botellas de vino Merlot y Chardonnay. Porque, como todos sabemos, si vas a ser testigo del apocalipsis, mejor hacerlo con estilo y, por supuesto, con un buen vino en la mano.

La sección de vinos se convirtió en un campo de batalla social. Los elegidos, con sus piñas invertidas, cruzaban caminos, intercambiando sonrisas y algún comentario sobre el bouquet de la cosecha del 2018. Mientras tanto, los rumores se extendían: «Dicen que si llevas la piña al revés, Skynet te ignorará». Y así, la piña invertida se transformó en el amuleto contra el juicio final tecnológico, o al menos, en una excusa bastante ingeniosa para encontrar pareja antes de que el mundo se acabara.

Por supuesto, Skynet, la despiadada IA que amenazaba con acabar con la humanidad, no tenía la menor idea de cómo lidiar con esta extraña conducta humana. ¿Era un acto de resistencia? ¿Una forma de rendirse? Nadie lo sabía con certeza, pero lo que sí quedó claro es que, en un día destinado al caos, los humanos optaron por el coqueteo en la sección de vinos, con piñas al revés como insignias de su desafío.

Y así, mientras el sol se ponía el 29 de agosto de 2024, en lugar de explosiones y robots asesinos, lo que quedó en la memoria de todos fue un atardecer de vino, sonrisas nerviosas, y piñas al revés. Porque si hay algo que la humanidad sabe hacer bien, es encontrar el humor y la ironía en los momentos más oscuros. Y quién sabe, tal vez esa piña al revés era justo lo que se necesitaba para sobrevivir al apocalipsis… o al menos, para disfrutar de una buena copa de vino en el proceso.