(Francisco Javier Zambrana Durán – Polideportivo El Limón)

Este fin de semana el Pabellón El Limón ha acogido el III Encuentro de Kárate Kyokushinkai de Andalucía, organizado por el Sakura Dojo. A causa de ello, es oportuno estudiar la serie de matices que diferencian el Kárate tradicional de esta modalidad creada por Masutatsu Oyama en 1964.

¿Cómo podemos definirlo de manera sencilla? 

El Kyokushinkai es una técnica que reúne varias artes marciales, tales como Kárate Shotokan, Goju Ryu, Muay Thai y Boxeo. Se basa en las formas de Kata y en la técnica Kion, así como en el estilo de combate Kumite.

Sin embargo, estas variedades descritas quedan lejos de la comprensión de un público no iniciado, por lo que para su mejor comprensión es preciso destacar que es un deporte combinado con mayor contacto. El Kyokushinkai es un tipo de arte marcial más violenta en la escala en comparación con el Kárate tradicional.

Diferencias más destacadas entre ambas disciplinas 

En primer lugar, es oportuno poner en valor que el Kárate será olímpico en Tokio 2020, mientras que el Kyokushinkai no está considerado siquiera dentro de posibles opciones para olimpiadas próximas. Este hecho hace que pierda relieve en el mundo del deporte de masas.

La segunda diferencia destacada es la forma de terminar un combate. En la modalidad Kumite de Kárate, se busca ganar por puntos, mientras que el Kyokushinkai cierra el cara a cara mediante un KO. A ello se le une el hecho de que posee ataques no permitidos en el Kárate tradicional que hacen que esta derivación sea considerada más agresiva a pesar de su apariencia.


Fotografías realizadas por: Francisco Javier Zambrana Durán (@neyfranzambrana/Francisco Zambrana).