(Francisco Javier Zambrana Durán – Pistas Municipales de Pádel de Alhaurín de la Torre)
Aquel deporte que cruzó el charco hace casi dos décadas ha terminado despertando las pasiones de una gran variedad de aficionados. Ya no es noticia que el pádel se haya convertido en un símbolo del sur de España, así como en una de las disciplinas más practicadas por todas las edades. Después de un progreso sin precedentes como deporte, se ha asentado en todas y cada una de las localidades malagueñas, llegando a desarrollarse de manera exponencial y dejando la evidencia de que ha superado a su competidor directo: el tenis.
El número de personas que practican el deporte se ha ido multiplicando con el paso de los años. La progresión y el desarrollo de clubes especializados ha dejado huella en sus deportistas, quienes cada vez se han ido profesionalizando en mayor medida. En cuestión de 5 años, entre 2012 y 2017, el pádel ha conseguido hacerse con casi doble de participantes federados en España, pasando de 39 652 a 68 786.
En especial, en Alhaurín de la Torre, dicha progresión se ha visto traducida en modificaciones en clubes inicialmente de tenis, los cuales se vieron obligados a instalar pistas dedicadas a la práctica del deporte de pala. El club de pádel del municipio se ha asentado con facilidad, atrayendo una gran variedad de practicantes de esta disciplina a sus lecciones.
Andrés Soriano Ferández, coordinador de la Escuela de Pádel de Alhaurín, destaca este hecho. »En este último torneo benéfico se han inscrito personas de todos los niveles: desde iniciación hasta Segunda Masculina. Hemos alcanzado los 100 participantes, es decir, 50 parejas en total».
Este hecho viene precedido por un sentimiento de compañerismo que el pádel desarrolla en sus participantes. Y es que, las normas de este deporte exigen el juego por parejas, a diferencia del tenis, donde es opcional y depende del torneo que se dispute. Los valores que inculca en sus deportistas son de respeto y aceptación del compañero y del contrario en cada uno de sus errores.
Otro de los aspectos que determina la progresión es la similitud con el tenis. Pese a que las normas no sean parecidas y que la pista se reduzca drásticamente, aquel jugador de tenis iniciado o semiprofesional puede alcanzar un alto nivel en esta disciplina. Este hecho no suele darse al contrario, ya que el pádel juega con movimientos de efecto de la bola para sacar partido a la superficie de juego, al contrario que el tenis, donde premia la potencia y el juego de movimiento del contrario.
En sí mismo, como deporte, su crecimiento se espera que siga en aumento. Desde su implantación, ha contado con un desempeño claro por parte de instituciones como el Ayuntamiento de Alhaurín, así como por los distintos aficionados que han realizado inversiones para crear escuelas en los distintos puntos de la capital malagueña. Este ha permitido que a día de hoy se tenga claro que su evolución acaba de comenzar, y que su futuro está todavía por ver.
Realizado por: Francisco Javier Zambrana Durán (@neyfranzambrana/Francisco Zambrana).
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