La regulación de los casinos en línea ha sido un tema sumamente espinoso para las partes involucradas, pues es sumamente complicado lograr un equilibrio satisfactorio. No solo aquí se logra apreciar casinos en línea de peso que intentan hacerse un lugar en Noruega.

También, la contraparte regulatoria se volverá más estricta, semejante a la de algunos países de la Unión Europea, y los vetos en transacciones de casinos no apegados a la normativa vigente se harán efectivos a partir de enero de 2020. Veamos brevemente las implicaciones de tal medida.

Breve contexto sobre la batalla contra los casinos ilegales en línea

Desde 2010 aproximadamente, se marcó un precedente respecto a la lucha contra los casinos sin licencia por parte de las autoridades noruegas: entró en vigencia un veto que pretendía volver sumamente difícil que los casinos en línea sin licencia pudiesen operar en la nación.

No obstante, la gran cantidad de casinos en línea que no se apegan a la estricta regulación en Noruega (similar en ciertos aspectos a las de España en el ámbito de la UE) se las han arreglado para sortear lo mejor posible el veto, gracias a que la ley tenía provisiones que paulatinamente fueron “superadas”, para el beneficio de las casas de apuestas sin licencia que obtuvieron grandes ganancias sin duda alguna.

Los entes regulatorios no dan tregua

Sin embargo, gracias a una enmienda recientemente aprobada a la ley mencionada anteriormente, se implementará un sistema mediante el cual se aplicaría un veto extensivo a la mayoría de transacciones de aquellos casinos en línea que no estén regulados.

Tal veto comprendería no solo bloquear las operaciones asociadas a los nombres de ciertas empresas y cuentas, también alcanzaría a los proveedores de servicios de pago, lo que tendría como consecuencia que fuese virtualmente imposible que las casas de apuestas foráneas pudiesen operar en Noruega.

¿Endurecimiento de las leyes o adaptación a las circunstancias?

De manera que, ante este panorama, es difícil no estar a la expectativa de lo que pueda acarrear esta dura medida de veto, podrían presentarse iniciativas en países de la Unión Europea para el endurecimiento de las leyes regulatorias de las casas de apuestas.

Más allá de esto, es necesario llegar a un consenso realmente equilibrado entre las partes antes de impulsar cualquier propuesta y enmienda de ley, considerando el bienestar de los jugadores, y teniendo en cuenta el impacto económico positivo que puede generar la industria de las casas de apuestas. “Playdoit” de México, por ejemplo, podría ser clave respecto a hallar soluciones donde puedan ganar todas las partes involucradas.