La capacidad de un hotel para mantener una temperatura agradable en su interior está estrechamente relacionada con su aislamiento térmico, lo que contribuye a crear un ambiente acogedor. Un espacio bien aislado protege contra las variaciones climáticas, además de reducir la transmisión de ruidos externos. El descanso, la comodidad y la tranquilidad son aspectos que condicionan que un cliente repita la experiencia.
Una de las mayores dificultades que afectan en la pérdida de calor son los puentes térmicos. Su presencia no solo tiene un impacto significativo en la comodidad del espacio, sino que incrementa los costos de los sistemas de climatización, además de ocasionar problemas de gravedad, como la condensación y formación de moho, que afectan a la calidad del aire interior.
Consejos para mejorar el aislamiento térmico en un hotel
Una de las preguntas que nos podemos hacer es qué particularidad tiene el aislamiento térmico para hoteles. Estas instalaciones deben asegurar el máximo confort a sus clientes y una experiencia inolvidable para la supervivencia del negocio. En términos generales, se considera que la temperatura perfecta debe estar entre los 20 °C a 22 °C, aunque la recomendada para la habitación de un hotel es entre 19 °C y 22 °C para proporcionar el descanso adecuado.
A diferencia de las viviendas, oficinas o establecimientos comerciales, los hoteles deben gestionar correctamente la eficiencia energética en instalaciones más grandes y complejas. Este tipo de negocio consume grandes cantidades de energía, por lo que un buen aislamiento mejorará la satisfacción de sus clientes, además de reducir los costes asociados a estos servicios.
Aislamiento de fachadas y muros
Existen varias particularidades del aislamiento para hoteles como la comodidad del cliente, la eficiencia energética o la privacidad de estos espacios. Sin embargo, el punto de partida para conservar una temperatura interior agradable es el aislamiento de las fachadas y los muros exteriores. Algunos de los materiales más eficaces son el poliestireno expandido (EPS) y el poliestireno extruido (XPS), ya que aseguran la resistencia térmica, además de ser fáciles de instalar.
Asimismo, la lana mineral, ya sea lana de roca o de vidrio, es un material que ofrece propiedades de aislamiento térmico y acústico. Los dos tipos son ampliamente utilizados en la construcción debido a su capacidad para reducir la transferencia de calor y el sonido, lo que contribuye a un ambiente interior más confortable.
Aislamiento de las ventanas
Otro punto clave son las ventanas, al ser puntos bastante vulnerables. Los hoteles suelen instalar ventanas de doble o triple acristalado para reducir el ruido exterior y minimizar las pérdidas de energía. Incluso, algunos de estos negocios optan por los marcos de ventana con rotura de puente térmico (RPT) como una solución avanzada en el diseño para mejorar el confort térmico de estos edificios.
Como vemos, el aislamiento térmico en un hotel es crucial por varias razones, como proporcionar mayor comodidad a los clientes, reducir los problemas de humedad, cumplir con la normativa vigente, mejorar su reputación y contribuir a la sostenibilidad. Para lograr dicho objetivo, no dudes en ponerte en manos de profesionales como PROVAISER, empresa líder en impermeabilizaciones y aislamientos térmicos en Valencia.