(Por Jmm Caminero) Hay tanto que leer y tanto que observar y tanto que analizar y tanto que pensar… que el tiempo se queda corto, porque también hay que hacer cosas, tanto que hacer, legal y moralmente…

Pongan por caso la literatura, el arte literario que es una luz o perspectiva de entender la realidad. Existen otras, otras artes, la mirada de las ciencias, la de la filosofía, la de la tecnología, la de la teología, la de la cultura en general… Y, todas nos proporcionan sobre un mismo tema y objeto, nos permiten tener una visión que completa o complementa las de las otras. Es imposible, nadie hoy, nadie humano, se entiende, puede conocer todas las perspectivas y dimensiones sobre un conjunto de hechos y fenómenos y entes y cosas. Nadie puede.

Quién lo ha intentado ha fracasado, y, además ha dejado de ser experto en alguna manera de mirada, y, por tanto, ningún grupo o comunidad cultural los considera de los suyos, y, por consecuencia, han tenido más posibilidades de entender fenómenos, más fenómenos en sentido amplio, pero también más posibilidades de fracasar en la vida social, laboral, económica, o la aplicación del saber para el ascenso social. Es duro decir esto, pero es cierto –aunque no sé en qué proporción de personas…-.

Dentro de la literatura existen multitud de géneros, y, además distintos escritos en distinta lenguas, y, además en distintas culturas, y, además en distintos tiempos… sea el género epistolar, el género del articulismo de opinión, el género de la poesía, el género de la novela, el género del teatro, el género del guión de cine como género literario, etc. No hay vida para tanto. Y, eso, sólo fijándose en lo que más aceptación cultural tiene y dispone en cada momento…

Por eso he indicado muchas veces, que expertos y especialistas en literatura, por ejemplo, cada año, con encuestas, nos digan cuales son las cincuenta obras más importantes de la literatura, por ejemplo. Así, así el que no sabe mucho de esto o sabiendo, tiene un mapa para orientarse. Porque se lee muchos productos, dicen de quinta fila, y, a veces, nos olvidamos los de primera fila –no critico a los de quinta fila, quién sabe, si algunos de estos, dentro de cien años son considerados de primera…-.

Hay tanto que leer, tanto, la vida es corta, en la vida hay que realizar otras cosas, hay que tener un trabajo y vocación para vivir y sobrevivir, trabajo y si es posible coincida con la vocación, si las has encontrado… hay, la generalidad así lo hace crear-criar una familia, hay también que ocuparse del mundo de la sociedad y de lo social y algo del Estado, aunque una persona sea pueblo o pertenezca al pueblo, también puede ocuparse del Estado… Todo esto me lo ha recordado el notable escritor y hombre culto, Félix de Azúa, en un artículo titulado: Calaveras de tinta, publicado en The Objetive, 21 de mayo del 2025… pero para que existan personas que lean, tienen que existir documentos-libros-páginas, y, para que existan libros tienen que existir personas que los escriban…

¿Por qué, porqué alguien se pasa tres años escribiendo un libro, quién sabe si diez años antes, pensándolo escribir, buscando materiales….? ¿Por qué alguien escribe un libro, en el género Memorias o memorias, que tiene diez mil o veinte mil páginas, hay muchos casos…? ¿Porqué alguien, que yo conozco ha escrito un libro, de un único título y un único autor, que tiene en el original sesenta mil páginas, y, qué nadie valora, y, que se perderá, y, que no se creerá que existió dentro de …?

¿Por qué los humanos hacemos arte, todo el mundo hace arte, todo el mundo hace arte o consume… todo el mundo…? Si, todo el mundo, la persona analfabeta, puede que cante, y, en ese cantar y cantos hace cambios. Cuándo éramos una sociedad rural, las personas se tiraban horas y horas en soledad, muchas veces en el campo, pues cantaban, era el arte predominante. Al cantar, narraban sus alegrías y sus penas, se curaban de sus alegrías y sus penas, y, además algunos, algunas veces, cambiaban palabras, modificaban tonos.

Todo el mundo hace arte, ciertamente, algunos pueden pintar quince mil pinturas y dibujos, y, otros solo diez, y, éstos siendo niños. Pero todo el mundo hace un tipo de arte, consume  -palabra que no me gusta especialmente- un tipo de arte, y, hace de alguna manera un tipo de arte. Usted será la escritura, otros la danza, aquellos el teatro, su vecina del quinto las teleseries… Todo el mundo hace y rehace arte, en mayor o menor medida, en mayor o menor calidad. Todo el mundo necesita la catarsis del arte, concepto greco clásico de Aristóteles… El arte es una necesidad, el arte-belleza es una necesidad como el aire, la comida, el refugio, la seguridad…

Hay que terminar los artículos, éste también, pero el mayor drama, no son los autores o escritores que no triunfan. Sino todos aquellos, la inmensa mayoría que saben que sus obras se perderán… Se perderán, así de simple y sencillo. Y, saber que la sociedad actual le da lo mismo, que se pierdan –este es el gran drama de miles y decenas de miles de autores y autoras-. Claro está, más drama son las personas que están muriendo en estos momentos: en guerras, epidemias resueltas, hambre, sed…

https://x.com/i/flow/login?redirect_after_login=%2Fjmmcaminero © jmm caminero (04 septiembre 2025 cr).

Fin artículo 5.093º: “Hay tanto que leer y pensar, Félix de Azúa”.