(UPyD) En estos momentos de plena campaña electoral quisiera resaltar la incredulidad palpable que hay en la sociedad respecto a la política y a todos aquellos que la ejercen independientemente del ámbito donde actúen (municipal, autonómico, estatal).
Es lamentable como la mayor parte de la población habla con descrédito de lo que han hecho, hacen o harán los dirigentes políticos a pesar de sus inagotables promesas electorales porque, como ya hemos observado, muchas de ellas son sólo eso, promesas cara a las elecciones con el fin de atraer votos para posteriormente dejarlas en el olvido. Sólo tenemos que fijarnos en el programa electoral presentado en su momento por Mariano Rajoy y comprobar (de forma veloz) todo lo que prometió y no ha llevado a cabo (que es mucho).
Pero, debemos mantener al menos un ápice de confianza ya que afortunadamente no todos los partidos ni todos los políticos son iguales, como solemos escuchar en cientos de ocasiones por personas hartas de lo mal que funciona este sistema. No podemos permitir que por culpa de una panda de indeseables ladrones, embusteros, manipuladores, timadores populistas, prepotentes ávidos de poder y lucro, etc etc se vaya a pique nuestra democracia, ésta por la que tanto lucharon otras generaciones y que tanto costó conseguir.
Hay un importante distanciamiento de la ciudadanía con la clase política porque ya nos cansamos de aferrarnos a falsos juramentos y compromisos volátiles y de que permanentemente las noticias que nos llegan (previo paso por numerosos filtros) nos den otro batacazo anímico por tantísimos recortes mientras algunos se suben los sueldos y las jubilaciones en plena crisis, por megaayudas económicas con cifras astronómicas a grandes bancos a los que se le ha permitido abusar y exprimir al ciudadano que acudía a él, con infinidad de mangantes con nombre y apellidos de traje y corbata ( o faldas en muchos casos) que campan a sus anchas con la vida solucionada en paraísos fiscales, con manifestantes (que no guerrilleros) que alzan sus voces aclamando no más abusos y poder llevar una vida digna. Un sin fin de informaciones que te hacen pensar que hagamos lo que hagamos siempre van a seguir corrompiendo el país y aburriendo a sus habitantes (esto último beneficia en las urnas al partido gobernante).¿Para qué votar si siempre van a salir los mismos? ¿De qué nos sirve si entre ellos se cubren y hacen los que les viene en gana? Si no hay justicia y la que hay parece que sólo favorece al rico…todos estos comentarios e interrogantes son los que provocaránn una posible alta tasa de abstención el día 25 de mayo.
A pesar de la cruda realidad que hemos y estamos viviendo (aunque Soraya Sáenz de Santamaría sostenga que ya se vive con más alegría, no sé dónde vive ella) debemos tener algo muy claro y es que lo malo se puede mejorar y eliminar pero la pasividad no es la mejor compañera para lograrlo.La única y mejor manera de castigar a los que no nos han prestado atención hasta ahora y que han fomentado este hastío democrático es quitándoles el “despachito” y su área de confort con un gesto tan gratificante como sencillo, votando.
No les importa cuántas veces necesitemos mejoras ni cambios coherentes, ni cómo nos sentimos los españoles, por ello le debemos hacer frente con nuestra papeleta electoral, así le tocamos el ego y algo más.Hace años por experiencia y madurez aprendí a no forzar a nadie a cambiar de opinión pero sí presentar alternativas y otros puntos de vista ya que a veces se nos escapan o no le prestamos ni siquiera atención. Es por ello que como afortunadamente el voto es libre y secreto que cada cual elija a quien le plazca pero eso sí, pediría encarecidamente que al menos se molesten en analizar la trayectoria y el trabajo desempeñado a lo largo del tiempo por el partido al que le brinda su confianza y a conocer a los candidatos que se presentan en las listas .
Ya tenemos un amplio currículum de los dos “grandes y todopoderosos” de España, PP y PSOE, así que saquen sus propias conclusiones visto lo visto. No votemos por tradición (años y años al mismo grupo político hagan lo que hagan, sin objetividad ni sentido crítico por su parte). De nada vale protestar y reclamar después si cuando llega el momento de actuar y ejercer nuestro derecho no nos movemos.
Desde UPyD os animo a acudir a los colegios electorales de 9h a 20h el próximo 25 de mayo y a prestarnos su confianza a nuestra formación. Permitan que otras personas cualificadas desempeñen el trabajo de la política con transparencia, que recobren la confianza y la motivación del país por el que van a trabajar y al que representarán en una Unión Europea donde todos tengamos voz y potestad (no sólo Alemania como nos ha parecido hasta ahora y la Troika).Se puede salir hacia adelante eliminando el bipartidismo que nos asfixia. No premien a quienes no se lo merecen, a quienes han quebrantado la confianza depositada en ellos, a quienes han extirpado prácticamente la clase media de España.
No se queden con las buenas intenciones de ahora, próximas a las elecciones europeas, no acepten más promesas de los que han mentido como bellacos tanto tiempo y pregúntense porqué ahora se acercan al pueblo y les muestran la mejor de sus sonrisas (papeleta electoral en mano), dónde estaban meses atrás; ahora lo quieren solucionar todo y tiempo atrás qué hacían.
La unión hace la fuerza así que unámonos para conseguirla.
Olivia Bueno Osuna, UPyD Alhaurín de la Torre.