Las tendencias en medicina natural no dejan de crecer. Algunas se han consolidado de forma eficaz demostrando grandes beneficios como sucede con la alimentación ecológica en la salud. Pero hay otras que todavía son desconocidas para el gran público y que pueden presentar dudas por este motivo. Una de ellas es el uso del CBD, un compuesto que no deja de ganar adeptos.

¿Qué es el CBD?
La mayoría de las personas asocian el cáñamo procedente de la planta de la marihuana con un consumo recreativo y penado por ley. Sin embargo, esta planta posee una enorme variedad de principios activos en su interior y no todos crean efectos psicotrópicos.
Uno de ellos es el CBD. Este elemento, que se comercializa en forma de aceite como los de Cibdol, ha pasado pruebas científicas demostrando no causar prácticamente efectos secundarios y no conduciendo a estados de adicción.
Es un punto importante entender esto. El CBD se puede usar en tratamientos médicos por no alterar la percepción de la realidad que tienen los que lo consumen. Alguien medicado con CBD podría ir a trabajar o conducir su coche sin ningún problema, ya que este cannabinoide no altera en absoluto el estado de conciencia general.

¿Es efectivo su uso?
Que no altere la conciencia no acaba con las lógicas dudas que pueden existir en torno al consumo de los aceites de CBD más comunes. La mayoría de estudios que se han hecho al respecto están todavía en fases iniciales, aunque parecen indicar que el CBD posee propiedades medicinales que pueden ser muy interesantes para ciertas patologías.
La pregunta acerca de las enfermedades que pueden mitigarse con este producto es una de las más básicas para el usuario que se plantea su consumo. Lo que dicen las investigaciones es que el CBD puede ser efectivo para paliar situaciones de dolor crónico o puntual o para reducir los problemas derivados de la hipertensión.
Más interesantes se muestran sus efectos sobre la salud mental. Un consumo de CBD habitual parece ser efectivo para mitigar los cuadros de ansiedad y de depresión, dos de las patologías psicológicas más extendidas por el mundo.

¿Cómo se consume el CBD?
Actualmente, la forma más efectiva de tomar este producto es en forma de aceite esencial. Las firmas suelen presentar el CBD en distintas concentraciones que se adaptan a cada tipo de circunstancia personal.
El aceite se diluye en agua y se toma de forma habitual no necesitando ningún tipo de preparación especial, algo que también es una de sus ventajas en comparación con otros remedios de medicina natural que sí que tienen que ser preparados de forma más elaborada.
Si los estudios en marcha terminan por confirmar los indicios que ya se están empezando a ver, el CBD puede ser una de las nuevas estrellas de la medicina ecológica y natural. Propiedades como reducir el dolor o aliviar los síntomas de la ansiedad y la depresión son aspectos muy destacados de un compuesto que, además, casi no presenta ningún tipo de efecto secundario en su consumo.