La noche que no duerme es parte de una trilogía con un tema en común: el miedo. El miedo  impregnado de humor. ¿Qué es real y qué no? Esta obra aborda el miedo más miedoso, el miedo a  uno mismo.
Un hombre y una mujer frente a frente: Están solos, apenas se conocen y ya no se aman. Y de nada han servido las artimañas para evitar el hastío. Y lo pero, es que ya es tarde. Así que se inventan otra forma de vida para salir de la costumbre, de lo cotidiano, haciendo cosas distintas, pero ni diferentes ni nuevas.

Formato de la lectura
La lectura comienza con el Hombre y La Mujer en dos atriles y el Narrado a pié del escenario de espaldas a los espectadores, de manera que sus intervenciones van seguidas paródicamente por los  actores. Este formato inicial nos permite que en las primeras escenas se puedan utilizar las manos
para interpretar y para interactuar con el otro personaje.

Esta disposición se variará durante la lectura para dar paso a una lectura más libre y con movimiento escénico. Las músicas acompañarán la acción y el narrador podrá en ocasiones rebobinar y veremos una misma escena interpretada de manera muy distinta.

Necesidades

Dos mesas medianas, dos sillas y 2 atriles.
La iluminación ha de estar sobre expuesta para facilitar la lectura de los actores.
El sonido es directo por lo que no hace falta amplificación.
Camerinos o similar.

Edades recomendadas

A partir de 13/14 años.
Para realizar en instituto con alumnado de bachillerato o adultos en casa de cultura.

A Telón Cerrado es un espacio de reflexión y encuentro sobre la dramaturgia malagueña como forma de acercarse a la realidad o realidades que coexisten en nuestra ciudad.

ATC divulga obras de teatro de autores malacitanos a través de lectura interpretadas.

Objetivo

Desarrollar actividades que acerquen el teatro autóctono a los espectadores y que las obras de los dramaturgos puedan pisar las tablas.

Sirviendo a este objetivo central, la adaptación a los espacios es una de las características de la puesta en escena de las lecturas. Se puede trabajar a la italiana o en arena y por tanto se integran los elementos propios del lugar en la realización final.