“¡Estudia, hombre en el asilo! / ¡Estudia, hombre en la cárcel! / ¡Estudia, mujer en la cocina! / ¡Estudia, sexagenario! / Estás llamado a ser un dirigente.” Loa del estudio. Bertolt Brecht.

(Por Eduardo Madroñal Pedraza) Tenemos que ser lúcidos sobre quién es el atacante. Y tenemos que unirnos contra el atacante para que nuestra lucha no sea una derrota sino un avance. El genocida Netanyahu acusa a Pedro Sánchez de lanzar “amenazas genocidas” a Israel. A Netanyahu le ha dolido, para nosotros una alegría. Lucidez y unidad. Drones en tierras polacas. Rusia amenaza, nosotros condenamos. Lucidez y unidad. Bolsonaro condenado por intento de golpe de Estado en Brasil. Trump histérico ataca, nosotros celebramos su derrota. Lucidez y unidad. Puigdemont defiende el catalán, pero impide la reducción de la jornada laboral. El Ibex35 se alegra, estadounidense y español, nosotros denunciamos a quiénes defiende de verdad. Lucidez y unidad.

Tenemos que ser lúcidos sobre quién es el atacante. Y tenemos que unirnos contra el atacante para que nuestra lucha no sea una derrota sino un avance. La Asamblea General de la ONU aprueba por mayoría una resolución a favor de crear un Estado palestino, dentro de la solución de los dos Estados, y España apoya. Israel y Estados Unidos votan en contra. Ellos sufren, nosotros nos alegramos. Una luz tenue frente a la oscuridad persistente. Caminos se abren, genocidas quieren cerrar. Lucidez y unidad.

Unir todo lo unible contra el atacante

La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, del Partido Popular: “Por responsabilidad alzo la voz ante la barbarie y el horror que se está viviendo en Gaza. Condeno el terrorismo y la violencia contra el pueblo gazatí”. Los genocidas rechinan los dientes, nosotros apoyamos llenos de alegría la valiente posición de María Guardiola. Lucidez y unidad. Aún más, apoyamos a cada votante, militante, cuadro o cargo público del Partido Popular para que, desde sus convicciones morales, rechacen sin paliativos el horror del sufrimiento del pueblo gazatí, y los animamos a que se manifiesten. Lucidez y unidad.

Vivimos tiempos turbulentos

La burguesía monopolista estadounidense con su representante Trump a la cabeza, conscientes de su camino hacia el ocaso como superpotencia, siguen reconociendo en el marxismo y el comunismo su auténtico y peor enemigo de clase. La dictadura hegemonista que está llevando el genocidio en Gaza a unos niveles de crueldad jamás vistos, que incendia Oriente Medio -bombardeando Irán, Siria y Catar- y que no duda en entregar Ucrania maniatada para atraer a Putin a una alianza, con un brutal rearme y amenaza a la paz mundial, imponiendo aranceles y un trato avasallador a una Europa demasiado sumisa, para aumentar la explotación, reducir las libertades y la democracia, y recortar los derechos sociales y las condiciones de vida de los trabajadores.

La realidad del mundo actual es que la mitad de la población mundial, unos 4.000 millones, viven en países que -en todo o en parte- han conseguido zafarse del dominio hegemonista o han logrado ganar amplias cotas de autonomía, impulsando un gigantesco proceso de redistribución de la riqueza en beneficio de los pueblos. Mientras que en dos décadas y media el campo imperialista capitaneado por EEUU ha pasado de suponer el 85% del PIB mundial a sólo el 57%, el Tercer Mundo ha pasado del 18,7% de la economía global, a suponer el 43%.

Los BRICS avanzan, otro mundo es posible

En 2009, el PIB combinado del primer grupo BRIC suponía el 17% del mundial. Pero en 2025, el PIB de los BRICS ampliados ya supone el 41% del PIB global, y sumando a los socios, llegaría al 44%. En 2009 el PIB conjunto del G7 suponía el 44% del PIB mundial y ahora ha retrocedido (porcentualmente) al 29% del global. Todos los países BRICS, con la excepción de la Rusia imperialista, son del Tercer Mundo, y han conquistado un camino propio de independencia, soberanía y desarrollo contra el colonialismo, el imperialismo y el hegemonismo.

Un cuarto de la humanidad vive en países socialistas, con gobiernos o regiones bajo la dirección e influencia -en uno u otro grado- de partidos comunistas y que gestionan casi una cuarta parte del PIB mundial, más de 26 billones de dólares. No hay un sólo país del mundo que no tenga un partido comunista dirigiendo potentes luchas populares, como el movimiento sindical indio, capaz de lanzar huelgas generales de más de 250 millones de trabajadores.

180 poblaciones, 1.800 organizaciones, 18.000 personas

Apostemos por 180 poblaciones de España simultáneamente clamando ‘Netanyahu y Trump al Tribunal Penal’, por 1.800 organizaciones exigiendo en un manifiesto el blindaje constitucional de las pensiones como un derecho fundamental español, y por 18.000 personas concentradas por la redistribución de la riqueza en toda España. Lucidez y unidad.

Eduardo Madroñal Pedraza