Puede parecer difícil, pero renovar una sala y convertirla en un espacio minimalista y deslumbrante usando únicamente sofás es posible, y muy económico.

No importa la época del año ni tampoco importa la cantidad de integrantes de la familia: el sofá es una de las piezas elementales de toda sala de estar. Es en el sofá donde se tienden a ver la televisión, con mantita en invierno o en ropa cómoda en verano. Es allí donde familia y amigos se reúnen para tener interminables charlas acompañadas de café. Por eso, un buen sofá debe contar con las siguientes características.

Características que todo sofá debe tener para estar en la sala

Debe ser cómodo

La principal característica de un sofá es su comodidad. Uno de los usos principales de estos muebles es el de las conversaciones dilatadas, toda la tarde, por lo que se necesita de un acogedor mueble que en ningún momento haga sentir incómodo. En algunas ocasiones, cuando hay invitados, un sofa cama barato puede ser la solución más pronta para comodidad, y para espacios disponibles para el descanso.

Debe tener las medidas adecuadas

Las medidas de un canapé dependerán exclusivamente de las medidas de la sala donde vaya a estar. Así, para una sala pequeña es mejor utilizar sofas baratos que tengan un diseño minimalista y permitan usar mejor cada centímetro disponible. También para estos espacios puede ser útil decantarse por sillones baratos y sencillos que, distribuidos en dos o tres ejemplares, brinden un ambiente acogedor.

Por el contrario, si se cuenta con un espacio mayor a los 35 metros cuadrados utilizar sofás en forma de L, modulares o del tipo Chaise Longue o diván, es la elección más acertada.

Diseño y estructuras

Si se ha optado por un diseño minimalista para la sala, es una obviedad que todos los muebles deben cumplir con la premisa de “menos es más”. Por ello, los muebles deben carecer de decorativos, sino más bien predominar por su sencillez, por la suavidad geométrica de sus acabados.

La estructura en la que son armados debe ser capaz de soportar el peso, pero también ser lo suficientemente cómodos para transportar y rediseñar la sala en cualquier momento. Liviandad y resistencia, sin descuidar la última característica de esta lista.

Durabilidad y precio

Una frase muy extendida dice que “lo barato sale caro”. Sin embargo, la elección de diseños cuidados y de materiales de por sí durables pueden hacer que la compra del canapé acabe siendo una gran decisión. Es posible que, dados los usos, un mueble de estas características termine dando hasta 8 años de vida útil, lo que representa una inversión muy bien realizada.

A pesar de ello, antes de comprar cualquier sillón debe ajustarse el presupuesto hasta el nivel óptimo, para no gastar de más, y para no gastar menos por un producto que no rinda el tiempo necesario.

Modos de adaptar los sillones en cada espacio: sin importar tamaño

 

No todos tienen las mismas medidas en su sala de estar. Pero, eso no se traduce en que algunos tengan el derecho exclusivo a lucir una sala de primer nivel. Todo depende de la ubicación y la distribución de los muebles. Para ello, algunos consejos para obtener el mayor rendimiento de los metros cuadrados de la sala, sin perder confort ni versatilidad.

Utilizar sillones y pufs para combinar y ahorrar espacio

Común denominadores en salas pequeñas, los pufs y los sillones sirven para dar un ambiente cálido y acogedor al espacio, sin los tamaños exagerados de otros ejemplares de su categoría.

Utilizarlos en combinación con una pequeña mesa central puede ser suficiente para una tarde de compartir o de televisión.

Utilizar formas de L y de U para salas pequeñas

Cuando se tiene una sala pequeña, es vital no incomodar con la inclusión de un nuevo objeto o mueble. Por eso, distribuir los divanes en formas geométricas que den prevalencia al espacio es una de las mejores decisiones.

En este sentido, la forma en L y la forma en U, también llamada C, son las vías más recomendables para ubicar los muebles.

Acompañar con espejos y cristales para aumentar sensación de espacio

Sea grande o pequeña la sala, utilizar los cristales aumentará considerablemente la sensación de espacio. Si la sala es el lugar de encuentro de la familia, esto se agradecerá mucho, pudiendo acomodar a más gente sin que se tenga una sensación de falta de espacio.