images (Esperanza Mena) Yo no sé porque motivo, ni porque milagro, ni porque razón, hasta que no somos madres no nos damos cuenta de lo que vale una madre:

 Cuando somos jóvenes, siempre pensamos que una madre es casi un incordio en nuestras vidas, nunca estamos de acuerdo con lo que nos dice, nos parece que ella vive en otra época y que nosotros estamos en poder de la verdad absoluta, ajenas a todas las penas y sufrimientos que una madre  pasa para sacar a delante a sus hijos.

  Pensamos que ellas tienen el deber de no quejarse nunca, de no demostrar flaqueza, de seguir siempre adelante contra viento y marea, y nunca pensamos lo que ellas sienten, como es su vida.

 Las madres son las verdaderas heroínas, pues saben hacer que una familia siga unida, y saben estar siempre al lado de sus hijos sean las circunstancias que sean.

 Todas estas cosas las aprendemos el día que nace nuestro primer hijo, no sé porque milagro de la naturaleza, todo cambia en nuestro interior, y el mundo entero nos parece diferente, ya no importa nada más que ese hijo, su prioridad es hacerlo feliz, y que no le roce ni siquiera la brisa:

 Por eso, hoy mi charla de hoy, es un homenaje a todas las madres del mundo, esas que con todo su amor, dan paz y tranquilidad a sus hijos en los momentos más difíciles de sus vidas, que los hace luchar para que consigan lo que más quieran en la vida, y estarán a su lado hasta que la muerte la separe de ellos.

 Pero sobre todo, te enseñan a darlo todo, sin pedir nada a cambio…¡¡Eso es, una madre!!