Charlas Conmigo Misma: Por fin termino este largo y cálido verano: tan cálido, que hasta las ideas y mis charlas se han quedado aplatanadas. Pero como ya el otoño está poniendo su oro viejo en los árboles, yo me pongo las pilas y vuelvo a mi rutina de charlar conmigo, porque, como lo único que este gobierno nos deja es el derecho al pataleo, yo pataleo, y creedme si os digo que hay motivos mas que suficientes para hacerlo.
Ya lo decía el gran Quevedo: «¡Poderoso caballero es don dinero!» Vivimos en un mundo donde solo cuenta eso, el dinero; solo tenemos que poner la “caja tonta” y ver las últimas noticias de las famosas tarjetas que los altos cargos de Bankia tenían como premio a su pertenencia a un banco que hemos rescatado todos los españolitos de a pie. ¿A quién le importa si el dinero que derrochaban era de unos pobres ahorradores?
Sin lugar a dudas a nadie de este gobierno ni a ningún otro político de turno: ellos solo saben coger el dinero y guardarlo en paraísos fiscales mientras el pueblo llano cada día se esta empobreciendo más y más.
Siento que mi charla de hoy sea tan dura y amarga, pero ésta es la realidad que nos ha tocado vivir y, aunque el gobierno diga que estamos saliendo de la crisis, ¡miente! Solo hay que darse una vuelta por Caritas o Cruz roja, (y de eso doy fe) pues soy voluntaria y cada día vuelvo a mi casa con el corazón encogido.
Espero y deseo que realmente la recuperación sea rápida y que nunca falte un plato de comida en cada casa…
¡Así sea!