(Francisco Javier Zambrana Durán) La conocida marca de zapatillas y de ropa deportiva, Nike, se propuso bajar de las 2 horas en una maratón de cara a este 2017. Kitwara se quedó en las 2:05 en Valencia este pasado domingo, y Kipchoge en 2:03:31 en Berlín el 24 de septiembre. ¿Podrá el ser humano bajar de esas espectaculares dos horas?

     Antes de especular, de pasar a la filosofía de los corredores, a la posible calidad, a los entrenamientos, etc., hay que tener bien clara una cosa. Dos horas son 120 minutos. Para completar 42 kilómetros en 120 minutos el ritmo debe ser de 2 minutos 50 segundos cada uno de los kilómetros, preferiblemente por debajo de esta cifra. Esto quiere decir que cada 100 metros el tiempo debe ser de unos 17 segundos, es decir, el doble de lo que tardaría una marca adecuada en esta competición específica.

     Estos 100 metros a 17 segundos se deberían realizar 420 ocasiones, lo que claramente haría reducir el rendimiento en cada una de ellas. Sin embargo, no debemos olvidar que existen momentos en los que pueden sobrecargarse los músculos, en los que un paso en falso puede descolocar el ritmo, o en el que, simplemente, el cansancio llega.

     El ser humano está preparado para hacer lo que se proponga, sí. Nadie creía en las marcas de menos de 10 segundos en los 100, hasta que un jamaicano levantó al mundo con un precioso 9’58. Nadie veía posible que alguien se alzase con más de 14 Grand Slams, hasta que un suizo hizo suyo el tenis. Nadie ve viable que alguien rompa los límites del hombre, hasta que llegue el momento.

¿Entonces, es posible?

     Teniendo en cuenta todas estas matemáticas, probablemente, y según varios estudios realizados por especialistas, tardaremos unos 3 años más en ver bajar el récord de Maratón a menos de 2 horas. Siendo realistas, la tecnología es complicada de mejorar, aunque lo que sí podría hacer que se consiguiese sería el crear un terreno únicamente específico para que corrieran los atletas esta prueba y que se tuvieran en cuenta los registros, en lugar de calles que pueden desgastar mucho más por el roce con el asfalto.

     ¿El problema de ello? Romper la magia de una Maratón. Si quieres batir récords, solo dejas huecos a los que quieren batirlos. Los cortes de cámara tan precisos dedicados a la cabeza de carrera, no serían posibles, ni siquiera el folklore del lugar se sentiría. No habría magia, por lo que tampoco habría récord.

Quizá ya se podría haber conseguido

     Ya se comentaba desde hace tiempo que si el pasado 24 de septiembre no hubiera existido aquel tiempo desfavorable, quizá Kipchoge hubiera roto el crono. Desgraciadamente, cuando el mejor atleta del momento en Maratón se encuentra en su mejor momento, no siempre coincide con el mejor tiempo.

     Claro, todo ello son suposiciones, o, en cualquier caso, puntos de vista, porque claro está que si alguien puede bajar de estas dos horas son ellos. Ellos corren a otro nivel, no se sienten satisfechos si suben a 2:08 o 2:10.

     El resto de Runners nos conformamos con terminar una Media Maratón, con ser felices. Bajar de dos horas, ese es nuestro objetivo, y el suyo, al menos, siempre en la mitad de distancia.