Es el partido de la temporada. Y no era algo ya escrito a principios del curso. Tampoco antes de que comenzara. Para especial ya están los derbis contra la Coineña o, aunque en menor medida, ante Carranque. También por la novedad. Pero no hay ningún vínculo a destacar entre el Kent y Alcalá. Ni mucha cercanía, ni mucha rivalidad, ni mucha historia. La competición manda y ha decidido que, a falta de ocho jornadas, se vean las caras con solo tres puntos de diferencia entre unos y otros. Los sevillanos, penúltimos (14); los alhaurinos, antepenúltimos (17). Y los primeros con un partido menos. Y el golaveraje particular en juego tras el empate de la ida (3-3). Si no es el encuentro más importante de todos, se le parece mucho.

Con Bujalance colista por debajo de los diez puntos y 21 partidos ya disputados, es decir, con solo siete en juego; y con Carranque y Sporting nueve por encima del descenso, parece que habrá dos participantes en este juego de la permanencia. O eso sería lo normal, más allá de la posibilidad de que los cordobeses dieran la sorpresa o malagueños y/o melillenses sufrieran una hecatombe. De tú a tú en la casa de Alcalá. Dejó pasar el Kent el cartucho de la ida y ahora está obligado a dar la nota en la peor de sus facetas. Porque los amarillos no han ganado en toda la temporada lejos de Alhaurín. Situación muy similar a la del curso pasado. Solo se había conseguido en una ocasión y había que volver a hacerlo. Se reconquistó Granada y se alcanzó la permanencia. Toca repetir para no tener que lamentar.

Tendrá que cambiar muchas cosas el Kent de cara al último partido. El Cádiz Virgili fue muy superior y se llevó un triunfo que siempre tuvo un único e incontestable dueño. Al final se logró maquillar el resultado (3-6), pero lo cierto es que se llegó al minuto 39 con un 1-6 en contra. No recibió menos goles Alcalá en su visita a El Ejido 2012. Se fue de tierras almerienses con otro set. Aunque ni mucho menos empaña esa derrota el buen hacer de los sevillanos en este 2019, que lo empezaron viendo cómo el Kent se iba hasta los ocho puntos de ventaja tras superar al Betis B el 12 de enero (3-1). Todo parecía ir genial; nada podía ir mal en este nuevo año. Pero dos meses después y sin una nueva victoria de los de Alhaurín, el conjunto de Alcalá de Guadaira ya ha conseguido bajar de los ocho a los tres.

Rival muy débil atrás el que tendrá en frente el domingo el equipo de Víctor Quintero. La peor defensa de la categoría contra el peor ataque. Los 45 goles a favor de los alhaurinos contrastan con los 91 en contra de los alcalareños. Será interesante ver si alguno de los dos consigue explotar, a través de las carencias del rival, su aspecto menos desarrollado. Podría estar ahí la clave de una victoria que ambos necesitan. Si bien parece que Alcalá es el más necesitado, no es menos cierto que el Kent ansía también volver a ganar para respirar y mejorar en sensaciones. Empatar sería lo menos malo y no provocaría otra cosa que prolongar una agonía que, si nada cambia, no va a tener fin hasta la última jornada del campeonato, allá por el mes de mayo, y con unas altas temperaturas que tampoco van ayudar.