(Francisco Javier Zambrana Durán – Alhaurín de la Torre)

»Finit hic deo» dice la película. Podríamos decir, pues, que a partir de entonces solo tendríamos demonios. Al menos esa es la conclusión que todos sacamos en limpio, que los demonios pudieron existir en aquel Monasterio de Carta en Rumanía. Lo que no comprendemos es la forma que estos tuvieron, la manera en la que desarrollaron sus andadas en aquel 1952 en el que se basa La Monja, la nueva entrega de la saga de Expediente Warren. No lo comprendemos, o no lo hacíamos hasta ahora.

La respuesta a la pregunta es no. El demonio planteado en la película no se trata de uno que esté reencarnado en una mujer, sino en un bebé mitológico al que se le conoce como Valak. Valak es el símbolo que los Warren siempre utilizaron como forma del demonio, y que apareció ya en la película de el Caso Enfield y en Annabelle: Creation. En ambos casos, y en la última presentada, toma forma de monja poseída por el demonio, algo que no tiene ningún tipo de relación con su origen.

¿Nos basamos en hechos reales?

Dependiendo de cuál sea el punto de vista sobre la religión del lector, podrían ser o no hechos reales. El caso es que existe un libro de demonología católica que se tituló Lemegeton Clavícula Salomonis, un volumen que  haría referencia a la Clavícula de Salomón, y que no tiene autor conocido. Su escritura tuvo lugar en el siglo XVII.

El objetivo del libro era detallar ampliamente los conjuros necesarios para invocar al demonio y obligarle a cumplir los deseos del exorcista. Además de ello, describe diferentes objetos que deben ser utilizados por el demonólogo en cuestión. Aun así, se divide en cuatro partes en las que estudia, junto con estas dos primeras, los tipos de espíritus, la invocación de ángeles y los rezos mágicos.

¿Quién es La Monja o Valak?

Valak no existe tan solo como un personaje de esta saga de películas de terror. Su verdadero nombre es Volac o Valac (aunque puede ser deformado como se comenta en la película), y se trata de un demonio con apariencia de ángel que es denominado como Gran Presidente del Infierno, teniendo bajo su tutela a un total de 30 (o 38 para algunos autores) legiones de demonios a su disposición.

Imagen del verdadero demonio

A la par de ello, Valak revelaría dónde se encuentran las serpientes y obligaría a comportarse mansamente a la persona ante el mago, así como da respuestas certeras sobre tesoros ocultos en la humanidad.

Un sacerdote bendijo el rodaje de la película

Ante estos sucesos que ya habían sido confirmados por varios libros, un sacerdote rumano bendijo el rodaje de la película de La Monja, ya que el trato que a la Iglesia se le da en la película podría traer cierta polémica por un lado y aspectos negativos por otro. El señor roció con agua sagrada por el cuerpo del director, Corin Hardy, en junio 2017, en una de las fases finales del rodaje.

Expediente Warren también deformó a Annabelle

En la película de Annabelle, esta fue tratada de manera distinta a como realmente existe, al menos en su aspecto. La muñeca real no se quiso utilizar en el rodaje por miedo a que pudiera traer la presencia del demonio a los lugares en los que filmasen. Esto mismo ha sucedido en las pasadas entregas de los Warren, donde los personajes toman una forma más siniestra y adecuada para el público popular que cuando es descubierta pierde todo su terror.


Investigación realizada por: Francisco Javier Zambrana Durán (@neyfranzambrana/Francisco Zambrana).