El alcalde asegura que la ampliación del IES Huerta Alta es solo un “parche” de la Junta que no solucionará las deficiencias de la oferta de educación secundaria y bachillerato del municipio. El Ayuntamiento ha ofrecido varios solares, así como adelantar la financiación

El alcalde de Alhaurín de la Torre, Joaquín Villanova, ha insistido en la necesidad de que la Junta de Andalucía construya un nuevo instituto de educación secundaria en el municipio, concretamente en la zona oeste del casco urbano para dar servicio a la población estudiantil de ese sector. Villanova asegura que el proyecto adjudicado este año por la Consejería de Educación de la Junta para ampliar el IES Huerta Alta es solo “un parche” que no vendrá a solucionar las deficiencias de la oferta de secundaria y de bachillerato en la localidad.

Esta ampliación supondrá que se incremente todavía más el número de alumnos y alumnas del Huerta Alta, donde actualmente hay unos 750 matriculados, sin dar una solución a los estudiantes que tienen que desplazarse varios kilómetros, procedentes de barriadas y urbanizaciones como Pinos de Alhaurín, Taralpe o El Alamillo. “Estos jóvenes, que ya tienen un colegio de influencia en Taralpe, necesitan un instituto cerca. Hemos ofrecido solares varias veces, el último de ellos en Pinos, con 25.000 metros cuadrados. El Ayuntamiento se ha ido preocupando de reservar parcelas para equipamiento en la zona oeste, pero la Junta sigue sin atender nuestras peticiones”, reseña el primer edil.

Alhaurín de la Torre cuenta actualmente con cuatro institutos, que iniciaron el curso actual la pasada semana: Gerald Brenan, Huerta Alta, Capellanía y Galileo. El Consistorio lleva por lo menos una década solicitando a la Junta que planifique y acometa un centro en la zona oeste, una reclamación que también han hecho las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos/as (AMPA) y que se ha aprobado varias veces en el Pleno de la Corporación. Además, se han organizado manifestaciones frente a la Delegación de Educación de la Junta y por el casco urbano de Alhaurín de la Torre.

En los últimos años, el Huerta Alta ha duplicado el número de líneas, que pasaron de 16 a 28, mientras que en Capellanía han pasado de 16 a 24 y en Galileo de 12 a 15. Las quejas se centran en los problemas de masificación y el excesivo aumento de la ratio de estudiantes por clase, así como la pérdida de zonas comunes para habilitar aulas provisionales, la escasa oferta de bachillerato y módulos y la instalación de barracones. El alcalde ha ofrecido en varias ocasiones la posibilidad de firmar un convenio por el que el Ayuntamiento adelantaría el dinero de la financiación, como se hizo en su momento con algunos colegios de infantil y primaria.