Los problemas y averías más frecuentes en una instalación eléctrica tienen solución.

Con el paso del tiempo, todos los elementos de los que disponemos en nuestro hogar o negocio se vuelve obsoleto. Llega el momento de cambiarlo, unas veces por otro igual pero nuevo, otras por uno que incorpore la tecnología más actual. Y de todos ellos, los componentes eléctricos probablemente sean los que más tiempo duren, aunque incluso estos necesitan una renovación cuando llega su momento. Cableado, automatismos y cuadros eléctricos se quedan anticuados o necesitan ser cambiados para adaptarse a las nuevas normas que a medida que pasa el tiempo se imponen para que una instalación sea segura. Veamos algunas claves para entender y renovar los elementos de cuadros eléctricos.

¿Qué función tiene el cuadro eléctrico?

Aunque se puede decir que es uno de los elementos menos valorados de viviendas y comercios, la función de los cuadros eléctricos es fundamental. Sobre estos se montan las medidas de seguridad que necesitamos para que la electricidad no sea un peligro. Diferenciales y magnetotérmicos se encargan de hacer el corte en caso de subidas de tensión o temperatura, que de no funcionar podrían ser motivo de incendios y otros problemas, como la avería en electrodomésticos.

De forma adicional, un cuadro eléctrico puede tener otras funciones, como temporizar el encendido o apagado de ciertas secciones, recibir órdenes de mandos a distancia o conectarse a una red domótica. Para ello, no servirá un cuadro tradicional, sino que será necesario instalar uno nuevo, adaptado a los requisitos de estas instalaciones.

Cuando hay que renovar el cuadro eléctrico

Si ha llegado el momento de hacer cambios en el cuadro eléctrico, bien en alguno de sus componentes o en todo el conjunto, se debe actuar con suma cautela, ya que la electricidad es bastante peligrosa. Por ello, lo primero que hay que hacer es desconectar por completo de la red. Para ello hay que bajar el interruptor general, y con mucho cuidado desconectar los cables de alimentación que canalizan la energía al resto de elementos.

Si solo queremos cambiar una pieza, como un diferencial o un magnetotérmico que necesita mayor potencia o se ha estropeado, el proceso es tan simple como quitar los cables que conectan el elemento y poner el nuevo de la misma forma. Es muy importante asegurarse de que las conexiones están bien fijadas para evitar cortocircuitos.

En caso de cambiar todo el cuadro, se procede a retirar y se coloca el nuevo, conectando los elementos en sus respectivas funciones. Se pueden encontrar cuadros eléctricos en Sumidelec y tiendas especializadas, tanto para empotrar como para colgar a modo de armario.

Una vez terminada la instalación, se conecta de nuevo y se comprueba que todo funciona de forma correcta.

Un trabajo que no puede hacer cualquiera

El cambio de un cuadro eléctrico, así como la incorporación o sustitución de cualquiera de los elementos, es una tarea muy delicada, que necesita hacerse con conocimiento. Por ello, en caso de que no sepas cómo funciona la electricidad, será mejor que dejes esta tarea en manos de profesionales. No es lo mismo cambiar una bombilla o poner un enchufe que meter la mano en el “corazón” eléctrico de tu instalación, así que no te lo tomes a la ligera. Hay trabajos que solo pueden hacer quienes han recibido una formación eléctrica adecuada.